¿Qué es el círculo de calidad?
Esta dinámica empresarial tiene su origen en los años 60 en Japón, pero ha ido cobrando importancia en las compañías de mediano y gran tamaño en todo el mundo. Los círculos de calidad son organizaciones internas en las que un grupo de trabajadores se reúne de manera periódica para evaluar la actividad, proponer mejoras y buscar soluciones a los problemas que se presenten en la actividad habitual.
¿Qué características tienen los círculos de calidad?
Veamos qué elementos definen a los círculos de calidad:
- Voluntario. Los integrantes del círculo de calidad se reúnen de manera voluntaria, a iniciativa o no de la empresa, pero sin obligatoriedad previa.
- Horizontal. Son empleados de un mismo departamento o área en igualdad de condiciones, sin verticalidad en los roles.
- Autónomo. El equipo trabaja sin intervención de los estamentos directivos y adopta resoluciones de forma democrática y consensuada.
- Periódico. Se reúnen de manera periódica, en base a un calendario establecido en cada caso.
- Acotado. No es aconsejable que el número de trabajadores implicados supere los 10 empleados ni baje de los 4.
Ventajas de los círculos de calidad
El principal beneficio de este tipo de dinámicas es a nivel de implicación y motivación. Los trabajadores toman las riendas de su propia actividad y se responsabilizan de las mismas a nivel ejecutivo sin intervención de los mandos, lo que redunda en una mayor concienciación con la propia actividad. Asimismo, establecer círculos de calidad facilita un clima de confianza en la compañía que redunda en el entorno laboral y supone un acicate para el talento interno. Los propios trabajadores de cada área, conscientes de sus fortalezas y debilidades, pueden comunicar sus necesidades de manera más efectiva y solucionar problemas con plena autonomía.
¿Cómo trabaja un círculo de calidad?
A nivel general, los grupos funcionan al modo de auditorías externas: identifican problemas, analizan cada caso y extraen información sobre lo sucedido. Juntos, buscan una solución consensuada y la exponen razonadamente a la dirección o a los mandos ejecutivos. Estos proveen de los mecanismos y herramientas necesarias para solucionar el problema. Finalmente, se evalúan el impacto de las medidas adoptadas.
Los círculos han de gestionar previamente su propia logística, por ejemplo, determinar la periodicidad de los encuentros, el lugar de los mismos y los integrantes. Se recomienda que las reuniones se celebren fuera del lugar habitual de trabajo, aunque sea dentro de la propia empresa; eso sí, se realizan en horario laboral.
Ejemplos de círculos de calidad
Como hemos dicho, esta filosofía nace en el contexto japonés, siendo Kaoru Ishikawa uno de sus principales teóricos. En los años 90 ya existían más de un millón de círculos de confianza en las corporaciones niponas. Debido a eso, la marca automovilística Toyota se ha convertido en un ejemplo paradigmático de aplicación de los círculos de calidad. La empresa cuenta con numerosos grupos en distintos departamentos y en diferentes lugares del mundo. De manera anual, sus círculos de calidad se reúnen en una convención en Japón. Estos grupos se han convertido en toda una institución en Toyota y cuentan con el apoyo de la directiva para facilitar su labor en cuanto a los regímenes de horarios o las necesidades técnicas.